Vosotros hacéis Nuestras delicias y Nos consoláis de tanta inmundicia como hay en el mundo y tanto materialismo e interés personal

Me gustaría, alma Mía, que todas las almas Me amaran como tu Me amas. Yo, Jesús te hablo. Ya se, alma Mía, que te preguntas si lo que te estoy diciendo es verdad o no lo es, pero sí, alma Mía, si es verdad y quisiera que las almas Me amaran como tu Me amas. Yo, Jesús, te hablo.

Aunque tu creas que el amor que Me tienes es mezquino y pobre, Yo Me siento consolado al sentirme tan amado por ti, pues se que tu vida se mueve solamente por Mí, para Mí y en Mí, sí alma, sí, es así y Yo Me recreo en todo lo que Me das que sale de tu corazón noble y generoso. Yo, Jesús, te hablo.

Hay otra muchas almas que también Me aman como tu y que Me hacen sentir consolado. Este es Mi hijo N.N al que he hecho otro cristo en la tierra y lleva muy bien no ya su cruz, sino su pasión, y Mi hijo N.N. que Me es fiel y enamorado de Mí. Yo os tengo a todos vosotros en Mi Divino Corazón y sois el consuelo de Mi Santa Madre.

Hay otras almas que también Me aman o aman a Mi Madre como tu hija la mayor, pues vosotros hacéis nuestras delicias y nos consoláis de tanta inmundicia como hay en el mundo y tanto materialismo e interés personal. Yo, Jesús, os hablo.

Di a Mi hijo N.N. que es para Mí un consuelo muy grande y que aplaca Mi sed constantemente con su espíritu de servicio y humildad, y a Mi hijo N.N. dile que es una gran coraza ante el mal satánico y que hasta los demonios le temen por la luz y sabiduría tan grande que tiene y que Yo Me he complacido en otorgarle.

Hijos Míos que Me amáis, Me consoláis y Me reparáis, Yo os digo que vuestros corazones forman uno con el Mío y el de Mi Santa Madre, y que al unísono laten con el Mío, porque lo que Yo quiero, vosotros lo queréis y lo que Yo no quiero, vosotros no lo queréis. Hijos, aunque solo he nombrado a vosotros cuatro, sabed que hay otros muchos corazones que también los tengo presentes y que Me consuelan como vosotros lo hacéis. Ellos están también unidos a Mí y cuando lean estos mensajes sabrán que Me refiero a ellos. Yo, Jesús, os hablo y os bendigo a todos los que hacéis Mis delicias. Mi paz y el amor de Mi Santa Madre estén con todos vosotros. Yo, Jesús, os hablo.