Carismas y más carismas derramará Mi Santo Espíritu en los últimos tiempos para aquellos que Me sean fieles en la tribulación. Yo, Jesús, os hablo.
Hijos Míos, el Cielo tiene preparado una inmensidad de carismas para las almas que Me sean fieles en la tribulación de los últimos tiempos, porque serán gracias que el Cielo os dará para la batalla contra el mal y, los errores que quieren inducir en la Santa Iglesia. Yo, Jesús, os hablo.
Muchos de vosotros ya vislumbráis estos carismas que se os han dado por adelantado, pero el que tiene un carisma se le dará dos y al que tiene dos, se le dará tres y al que no tiene también recibirá su parte, porque será difícil que nadie quede sin carismas por la necesidad tan grande que tendré de que todo Mi rebaño Me sirva y Me siga. Hijos Míos, en tiempos de tribulación será muy difícil seguirme pero Yo os allanaré el camino con gracias especiales y carismas para que no sucumbáis al desaliento y hasta a la desesperación. Yo, Jesús, os hablo.
Cada carisma será efectivo según la fe y disposiciones del que lo reciba, y también Mis sacerdotes tendrán carismas, porque serán los más perseguidos y atacados. No temáis nada de lo que va a venir, porque hijos, Mi poder es tan grande como Mi amor por vosotros, y Yo os amo hasta la saciedad y no dejaré que sucumbáis. Yo puedo y quiero, por eso, solo tenéis que venir en pos de Mí y cumplir Mi santa y sabia doctrina y los mandamientos de la Ley de Dios. Cumplidlos de corazón y veréis como pasáis la tribulación con la misma facilidad con que Mi pueblo cruzó el Mar Rojo escapándose de Egipto. Yo, Jesús, os hablo.
Nunca Dios falló a quien le es fiel y le sirve en lealtad, si eso no lo hacéis ni siquiera vosotros que sois pecadores, mucho menos lo hace Dios que es la Bondad Infinita. Pero sed oídos sordos a todo lo que os presenten que no tenga que ver con Mi Evangelio, porque por muy bonito que sea lo que os presenten puede ser un veneno presentado como algo bueno. Por eso, invocad a Mi Santo Espíritu pidiéndole discernimiento y no os apartéis del Evangelio que tiene que ser el pan vuestro de cada día. Todo lo que Yo no haya dicho no es Mío. Quien hable otra doctrina que no sea la Mía, no viene de Mi parte. Por eso hijos, estad alerta y no os dejéis engañar, porque el enemigo es muy astuto y os presentará las cosas de forma que parezcan cosas del Cielo, cosas de Dios, pero que traen el aguijón del veneno a vuestras almas y vidas. Yo, Jesús, os habo.
Estad unidos como una piña en Mi amor a los pies de Mi Inmaculada Madre. Rezadla, veneradla, agasajadla, cantadla, que Ella sea para vosotros punto de unión. Yo, Jesús, os hablo.
Tened en vuestros hogares rosarios bendecidos, medallas, detentes, estampas y todo aquel material que bendecido ahuyenta a los demonios y al mal, y tened fe de que Yo he vencido al Mal. Yo, Jesús, os hablo y os advierto. La paz del Cielo esté siempre con vosotros, rebaños de Mi Divino Corazón.
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